El último acto de Chespirito: Quico se va y Roberto Gómez se divorcia

Con un matiz de melancolía, la serie biográfica «Chespirito: sin querer queriendo» ha llegado a su emotivo final. El último episodio, titulado «Valió la pena», marcó el cierre de una era, evidenciando los desafíos personales y profesionales que enfrentó Roberto Gómez Bolaños. Se aborda la difícil decisión de soltar a colaboradores clave y el inicio de una nueva etapa junto a Margarita.

El desenlace no solo fue un adiós a personajes entrañables, sino también una profunda reflexión sobre la reinvención. La serie honró la capacidad de Gómez Bolaños para adaptarse y mirar hacia el futuro, incluso ante circunstancias adversas. Es un tributo a las figuras que marcaron la televisión mexicana y la infancia de millones.
El octavo capítulo desveló la propuesta de Ernesto Figueras, dueño de Televisora Estelar, de llevar «El Chavo del 8» a la pantalla grande. Esta idea generó un dilema en Roberto, quien priorizaba la permanencia de sus icónicos personajes en la televisión. Sin embargo, la imposición empresarial prevaleció sobre su visión.

Paralelamente, el episodio profundizó en la esfera personal de Roberto, mostrando su conversación con Margarita sobre la imposibilidad de tener hijos. Graciela, su pareja en ese momento, comprendió la situación y decidió poner fin a la relación, permitiendo a Roberto enfocarse en su matrimonio y su esposa.
