Zapopan, Jalisco — Autoridades del estado de Jalisco confirmaron el hallazgo de 34 cadáveres en una fosa clandestina localizada en una zona residencial en construcción en el municipio de Zapopan, al oeste de México. El descubrimiento se convierte en uno de los más impactantes en lo que va del año, en una entidad golpeada por la violencia del crimen organizado y las desapariciones forzadas.
La Fiscalía del Estado informó que los restos fueron recuperados tras un proceso de búsqueda que se extendió desde febrero pasado, cuando trabajadores de la construcción alertaron sobre olores fétidos y posibles restos humanos. Posteriormente, las autoridades iniciaron excavaciones apoyadas por perros de búsqueda, georradares y drones.
De acuerdo con el fiscal estatal Salvador González de los Santos, los restos se encontraban distribuidos en 169 bolsas plásticas, que al ser analizadas permitieron determinar la existencia de al menos 34 cuerpos. Hasta ahora, no se ha informado cuántas de las víctimas han sido identificadas, pero se ha confirmado que las tareas forenses continúan.
La zona del hallazgo, ubicada en la colonia Las Agujas, ha sido acordonada y permanece bajo vigilancia. Peritos y elementos de seguridad trabajan en la recolección de indicios y en la documentación de los restos, con el fin de contribuir a las investigaciones y dar con los responsables.
Este hallazgo se da en medio de un contexto alarmante: Jalisco es uno de los estados con mayor número de fosas clandestinas y personas desaparecidas en el país. Según cifras oficiales, tan solo en 2025 se han localizado 33 fosas en el estado, con un saldo preliminar de 111 cuerpos recuperados antes del caso de Zapopan.
Organismos de derechos humanos y colectivos de búsqueda han reiterado la urgencia de fortalecer las capacidades institucionales de investigación y de dar una respuesta efectiva a las familias de personas desaparecidas. Mientras tanto, la población permanece consternada ante la magnitud del hallazgo.
El Gobierno estatal ha prometido continuar con las investigaciones y brindar apoyo a las familias afectadas, así como coordinarse con autoridades federales para enfrentar la violencia criminal que azota la región.
El caso de la fosa en Zapopan se suma a una larga lista de sitios de exterminio y ocultamiento de víctimas que han sido descubiertos en distintas partes del país, lo que pone nuevamente en el centro del debate nacional la crisis de desapariciones en México.
