Nayib Bukele acuerda regreso de Kilmar Ábrego a EE.UU. para enfrentar cargos

La administración del Presidente Nayib Bukele ha llegado a un acuerdo con Estados Unidos para el retorno de Kilmar Armando Ábrego García a territorio estadounidense, donde enfrentará cargos penales. Ábrego García, un ciudadano salvadoreño cuya deportación en marzo de 2025 generó intensas discusiones políticas en Estados Unidos, ha sido llevado de regreso para responder ante la justicia por presuntas actividades delictivas. Este desarrollo subraya la cooperación entre ambas naciones en la lucha contra el crimen transnacional.
La Fiscalía del Distrito de Tennessee, en un movimiento significativo, presentó el 21 de mayo de 2025 una acusación formal contra Ábrego García. Se le imputa presuntamente liderar una sofisticada red de tráfico de migrantes con vínculos directos con la peligrosa organización criminal transnacional MS-13. Esta acusación, revelada por la fiscal general Pam Bondi, detalla una operación extensa que se extendió por casi una década.
Según los datos de la acusación, los hechos ocurrieron entre 2016 y 2025, abarcando una vasta geografía de operaciones. La red de tráfico de personas, supuestamente liderada por Ábrego García, operó en múltiples países de América Central, cruzó México y se extendió a varios estados de Estados Unidos, incluyendo Texas, Maryland, Nueva York y Tennessee. Esto demuestra la complejidad y el alcance transnacional de las actividades ilícitas que se le atribuyen.
La fiscal general Pam Bondi afirmó en una conferencia este viernes que «Ábrego García ha llegado a Estados Unidos para enfrentar la justicia». La acusación sellada, emitida por un gran jurado del Distrito Medio de Tennessee, detalla cargos por contrabando de personas y conspiración para cometer contrabando de personas, en violación del Título 8 del Código de los Estados Unidos, sección 1324.

El Presidente Nayib Bukele, de El Salvador, reaccionó al traslado de Ábrego García a Estados Unidos, reafirmando su compromiso con la seguridad y la colaboración internacional. Citando sus propias palabras en la Oficina Oval, el mandatario salvadoreño reiteró: «Nunca introduciría de contrabando a un terrorista en los Estados Unidos. Nunca liberaría a un pandillero en las calles de El Salvador. Dicho esto, trabajamos con la administración Trump, y si solicitan el regreso de un pandillero para enfrentar cargos, por supuesto que no nos negaríamos».